Querida Marca,
Siéntate y observa.
Mira.
Escucha.
Aprende.
Verás que a tu alrededor ocurren muchas cosas, que todo va muy rápido, que todo pide tu atención, pero ten claro que no hay que reaccionar a todo. Porque no todo gira en torno a ti, por eso no es necesaria tu reacción. Si saltas a la corriente y no has medido bien tus fuerzas, te arriesgas a que te lleve y te aleje de donde tienes que estar.
Siéntate y observa.
No todo merece tu reacción.
Aunque de todo deberías aprender, Querida.
Un abrazo!
L.
PD.- No, no me he ido a un retiro budista este verano, tranquila.