Querida Marca,

No sé si es solo cosa mía, pero tengo la sensación de que ahora hay muchas (demasiadas) marcas con prisa. Todas en una espiral frenética de actividades. Webinars, directos, charlas, publicaciones, da igual, la cosa es hacer cosas y hacerlas ya.

Lo que no tengo claro es si esas prisas, esa urgencia, es algo que demande su público, o algo autoimpuesto para justificar su propia existencia (o la de quien ahí dentro habita)

Si es lo primero, pues nada, adelante, aunque yo cada vez soy menos amigo de esos ritmos, pero si es lo segundo, ojocuidao, porque solamente estaremos metiendo ruido.

Y el ruido, tarde o temprano, molesta.

Está el tema complicado, Querida!

Cuídate,

L.

¿Quieres que te ponga en copia oculta en los siguientes? ¡No problemo!

¡Ponme en copia!